Se terminaron las hojas de mi
libreta,
esas que el tiempo pone amarillas,
hoy comienzo otra etapa nueva,
la voz despierta, mi alma brilla.
En mi mano izquierda, pesa el yeso,
de un resbalón nervioso y atrevido,
he dejado paciente que pase el
tiempo,
al empezar Diciembre es bienvenido.
Me quitarán la escayola en mil
pedazos,
y si Dios quiere pronto volveré a
guisar,
empanadas, croquetas y algún hornazo,
chocolate, bizcocho y tarta real.
Pasearé por el campo sin ataduras,
cantaré las canciones que sé cantar,
mi guitarra a la espera, esa es la
duda,
es posible que pronto pueda tocar…
El Otoño despierta aquí en mi pueblo,
fuerte el viento sopla a mi
alrededor,
las hojas susurran poemas y cantos,
mensajes ocultos con tenue voz.
Silba el aire fuerte tras los
cristales,
una rosa resiste en su rosal,
el geranio alegre luce sus flores,
se mece la higuera, baila el nogal.
Una nube sombrea hoy mi huerta,
se prepara la lluvia, el cielo azul,
mi guitarra reposa aquí en mi sala,
en mi interior canta, nace otra luz.