lunes, 9 de julio de 2012

TRANQUILIDAD


Camino por la vereda
de mi paseo conocido,
dejo atrás la carretera,
pienso despacio, imagino.

En mi pueblo de descanso
respiro tranquilidad,
canta el río tras los álamos,
la higuera regala bondad.

El murmullo de las ramas,
en su nido un colibrí,
belleza y calma en mi alma,
huelo a magnolio y jazmín.

Colores todos mezclados,
susurros, Paz en el viento,
leo en la sombra del recodo,
lo que puede ser, un cuento.

Rojas, blancas y moradas,
petunias, rosas, geranios,
las musas siempre aladas,
atenta sigue Rosario.

Se guarecen tras la hiedra,
se asoman a mi balcón,
a todas horas hay fiesta,
en silencio y sin sol.

Entre líneas las encuentro,
una palabra, un error,
las noto en el firmamento
y en la espina de una flor.



Os regalo esta magnolia, me encantará verla en vuestra ventanas.
¡¡FELIZ VERANO!!