La flor estará latiendo en mi alma,
cuando solo sea sombra,
entre las sombras
y tendré el perfume y la calma,
en la tierra, la piedra y las arenas.
Mis pies que han pisado las praderas,
se elevaran de puntillas por las olas
y la brisa sonará con sus sonajas,
espantándo la mosca y las abejas...
y un canto vibrante soñará...