La luz infinita, pinta de colores el firmamento,
el mar la recibe majestuosa.
Se viste de fiesta para bailar al nuevo día.
La espuma levanta su falda y se balancea con ritmo marino.
Una mariposa eleva su figura elegante,
sin miedo ni al viento ni al frío.
Sus alas gigantes se balancean,
seguras y firmes en el hilo.
Se nota observada y presume, exhibiendo un lindo vestido.