Lo prometido es deuda,
por fin lo he conseguido,
con moldes y la receta…
¡Me ha ayudado el Principito!
Y como siempre he estado “Imaginando”
Entra el sol en mi cocina
y se mira en los espejos,
baila entre las vitrinas
y cantan los azulejos.
Echa chispas mi hornilla,
el horno pinta en colores,
mi casa huele a vainilla,
canela por los rincones.
Corazón de chocolate,
soles y lunas
naranjas,
muchos luceros granate,
el firmamento es fragancias.
Y las miro embelesada,
y comienzo a imaginar,
cualquier día de esta semana,
las tendré que mejorar.